
Aprendí a caminar y reir sola en la calle. La verdad la aprendí de mentir sólo por vos.
El dolor lo tuve que volcar dentro de un vaso. Y el fracaso lo pude escribir en una canción.
Aprendí a no callar, defendí mis ideales. A robar aprendí aquella vez que me robaron, y ahora puedo pedirte perdón 100 años más.
A cantar no aprendí pero igual sigo cantando. Aprendí a tocar fondo y subir de un sólo saque. Puse en jaque mi vida sin dar una explicación. 100 años más.
No hay comentarios:
Publicar un comentario